Alcalde, en sus narices
Sí, en las narices del alcalde municipal el parque Espejo de Agua está destrozado, montones de basuras, el cuerpo de agua sucio, las luminarias obsoletas, jóvenes consumiendo droga y delincuentes atracando; todo esto justo al frente de la residencia de la primera autoridad de este municipio.
De aquel hermoso parque tengo gratos recuerdos, pues aún estando muy niño íbamos en familia a disfrutar de un espacio digno para propios y visitantes, en el álbum familiar guardo fotografías de primos, amigos, hermanos, tíos y papás gozando de ese bello lugar. Hasta hace algunos semestres, en el 2014, en clase de Geopolítica, en compañía de la docente y todo mi curso de sociología, estuvimos en Baranoa, y qué orgullo poder mostrarles el parque Espejo de Agua y hablar de toda nuestra cultura en este lugar.
Muchos a través de las redes sociales han demostrado su preocupación por el estado actual del parque. En buen momento y, ante esta situación, los líderes Helmer De La Valle y Edgar Silvera convocaron a un significativa jornada que logró comprometer a Guillermo Polo, secretario del interior del Atlántico, pues preocupa aún más siendo este un sitio donde se reúnen grupos artísticos a ensayar, clubes deportivos como el de patinaje, jóvenes que desean jugar un partido de fútbol, gente con estilos de vida saludable o cualquier otro que solía encontrar en el parque un sitio de paz.
Hasta el 31 de diciembre hubo empleados encargados de mantener limpio este espacio, mientras que hoy, sólo un celador es quien se encarga de vigilar el extenso parque. Este mismo celador lo encontré barriendo la basura, es el mismo celador que cumple la labor de jardinero y todos los días, hasta donde puede, riega los jardines para que estos días de verano no acaben con el verde esplendoroso de los árboles y plantas.
Claramente gran parte del compromiso de cuidar del parque es de todos los ciudadanos, aunque también es necesario aclarar que la responsabilidad del parque está en manos del departamento. No obstante, es absurdo que esto pase en la Baranoa Social, y si esta no es una prioridad dentro de su gobierno, señor alcalde, estamos graves, dado que es su obligación velar por que se cumplan las condiciones mínimas. Espero y la repuesta a esta inquietud no sea que «el parque ha estado así desde hace 4 años», porque esa respuesta mediocre ya nadie se la come, el compromiso es suyo.
Alcalde, preocupa su silencio y el de su gobierno, aún más preocupante que el parque Espejo de Agua esté en esas condiciones y, lo que es peor, que esto suceda en sus propias narices.